“Los alimentos naturales aportan lo que el atleta necesita”

El especialista explicó que, dentro de la alimentación, podemos encontrar todos los nutrientes que necesitamos, incluso los deportistas de élite, que precisan una dieta más rigurosa: “Cuando indagamos en los hábitos de vida de este tipo de atletas nos damos cuenta  de que no son siempre los más aconsejables y, si en esos casos, hacemos pequeñas modificaciones,  encontramos grandes beneficios. No siempre hay que tender a utilizar los suplementos, sino que es más favorable modificar los hábitos naturales y saludables que todos necesitamos. Ésta es la idea que nosotros difundimos”.

El doctor habló de los alimentos que no deberían faltar nunca en nuestra dieta: “Está claro que hay alimentos más beneficiosos, pero los principales se encuentran dentro la dieta mediterránea (frutas, verduras, legumbres, frutos secos, cereal, aceite de oliva…). Esta dieta es suficientemente rica como para pensar en nutrientes artificiales”.

Por otro lado, Galiano también indicó que “no todo es negro o blanco. Existen situaciones de autogasto energértico donde los deportistas sí pueden compensarlo con suplementos. Fundamentalmente, los más habituales son algunas vitaminas y minerales. Lo que no es normal es que al pensar en suplementos se piense en proteínas. Las ingesta indiscriminada de proteínas artificiales, cuando podemos encontrarlas en numerosos alimentos naturales, es lo que nosotros creemos que no debería hacerse. Aún no se ha demostrado que la ingesta de proteínas sea inocua. Debemos ser conscientes de que todo aquello que tomamos cambia nuestro organismo, sobre todo desde el punto de vista genético. Está claro que somos lo que comemos y, por ello, es importante pensar qué suplemento usar y en qué condiciones y momentos”.

Por último, hizo hincapié en la importancia de ponerse en manos de especialistas de la nutrición. Afirmó que “el deporte de alta competición es muy cruel en este sentido. Ganar o perder puede depender de pequeños detalles y una alimentación adecuada es lo que se denomina “el entrenamiento invisible”. Es un elemento muy importante y lógicamente debe estar en manos de especialistas, al igual que cuando se trata de reparar una lesión o cuando se necesita un programa de entrenamiento específico. Es fundamental rodearse de personas preparadas para ello y alejarse de gurús que están muy lejos de la ciencia”.